Mi querido Don Pío:
En suspenso me hallo esperando una respuesta, más, pienso que
la espera sea en vano yendo ya mi corazón en llanto y bien se me antoja no andar en
remedio como si ya muerto para mí anduvieras en cualquier cementerio vacío de
dicha y en desencanto.
No quiero para ti ser tormento pero sí saber cómo están tus
momentos si son acaso de dolor, desdicha o tormento. Pues si en pena o
inquietud fuera estar tu alma, quién más
que yo arreglarla pudiera.
O en el contrario entendimiento que por mi causa sufriendo anduvieras pues bien
me dijeras no querer más que recuerdo fuera aquel Amor que dejó dulzores con su licencia pura.
Pues en pensar, bien pienso encontrar tú, amores que más que
de mí persona, buen partido en acertar pudieras y que yo aceptara para que a tu beneficio perteneciera, y, ahogando
mi dolor, a un convento yo me fuera.
Siempre tuya Loreto
Pilar Novales
Me resulta de mucho gusto, amiga.
ResponderEliminarAbrazos